Un hogar sano es fundamental para evitar futuras enfermedades, sin embargo, la limpieza no lo es todo. Para mantener la salud de tu casa necesitas un ambiente con unos niveles adecuados, especialmente los referentes a la humedad.
Aunque este solo suele ser un problema grave en casas antiguas o mal aisladas, durante el invierno, las humedades son frecuentes en la mayoría de hogares. De hecho, en España, más de la mitad de los alojamientos están afectados por un exceso de humedad según un estudio realizado por Netatmo, en el que se afirma que el 54 % de las viviendas presentan tasas demasiado elevadas.
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS), en su publicación “Guía sobre la calidad del aire interior: humedad y moho”, establece que hay una relación directa entre la presencia de humedades en los edificios y el riesgo de aparición de infecciones respiratorias, asma, bronquitis y rinitis alérgica.
Por su parte, el Instituto de Medicina de los EE.UU. concluye, a través de distintos estudios, un considerable aumento en la aparición de enfermedades relacionadas con la presencia de moho y bacterias en espacios interiores afectados por la humedad. En concreto un 50% más de enfermedades asmáticas, un 50% más de aparición de tos, y un 52% de otros síntomas del tracto respiratorio superior.
Por lo tanto, la salud de una familia puede verse amenazada viviendo en un hogar afectado por problemas de humedad. En este sentido, los niños y las personas mayores tienen sistemas inmunológicos más débiles y son más vulnerables.
Aunque para mucha gente la humedad no es más que un problema principalmente estético, puede tener graves consecuencias para la salud, y es que deberías tener en cuenta que unos niveles superiores al 65% de humedad relativa de forma permanente pueden ser perjudiciales para las personas que permanezcan en estos espacios, causándoles diferentes afecciones.
getty imagesIncluso, según apunta un estudio reciente publicado en la revista Physics of Fluids, la humedad aumenta el riesgo de contagio por coronavirus al prolongar hasta 23 veces más su supervivencia en el aire.
Si tienes problemas de humedad y quieres cuidar tu salud y la de los tuyos, existen productos que te pueden ayudar a mantener a raya este fastidioso problema. Por ejemplo los deshumidificadores, que se convierten en una alternativa accesible para regular la humedad ambiental.
El deshumidificador de Lidl puede eliminar hasta 10 litros de humedad en 24 horas y reduce la sensación de frío en invierno
Existen tres tipos de humedades recurrentes, son las consideradas por capilaridad, filtraciones laterales y condensación. Sus orígenes son distintos, pero si se dan las distintas casuísticas pueden sumarse y causar problemas mayores.
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En este caso, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) aconseja actuar con rapidez diagnosticando el problema, pues los posibles tratamientos y soluciones pueden ser muy diferentes: “Es fundamental ventilar la casa habitualmente e ir al foco del problema; o sea, encontrar de dónde parte la humedad. De lo contrario, la humedad persistirá por más capas de pintura que se apliquen a la mancha. En los suelos la limpieza es también fundamental, y si se trata de suelos exteriores tendremos que comprobar su drenaje y evacuación, si presentan fisuras o grietas. En ocasiones las concentraciones de agua en las inmediaciones de la vivienda pueden acabar afectando a la misma”.
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